www.neuralex.es – (26/05/2018)
Eva Fariña
1. Respeta el sueño
Es necesario dormir un número de horas suficiente como para sentirnos bien durante el resto del día. Además, un sueño reparador ayuda a evitar el estrés, el agobio y la ansiedad, que son causas potenciales del deterioro cognitivo. Un buen sueño fortalece las conexiones neurológicas y mejora nuestro sistema circulatorio. A menudo escuchamos que hay personas que presumen de dormir pocas horas; pues bien, esta falta de reposo puede causar complicaciones a medio y largo plazo.
2. Cuida tu cuerpo
La psique está directamente relacionada con el físico. Así que para mantener nuestras funciones intelectuales en un buen estado es imprescindible cuidar el cuerpo. Los médicos nos suelen dar tres consejos muy sencillos y, a la vez, muy difíciles de cumplir, como son mantener una alimentación sana (especialmente pescado y fruta), realizar ejercicio de manera habitual, evitar el tabaco y otras sustancias tóxicas.
3. Mantén la actividad
Cualquier ejercicio contra el sedentarismo es bienvenido: pasear un par de horas al día, hacer ejercicios regulares y suaves de gimnasia o pilates, practicar natación… Además, es muy importante que las personas afectadas por la pérdida progresiva de memoria no dejen de hacer las actividades diarias, como la limpieza de la casa, la compra, etc.
4. Practica la lectura
Diversas investigaciones apuntan a que las personas que leen y escriben habitualmente tienen menos problemas de pérdida de memoria durante el transcurso de los años. En concreto, los especialistas nos recomiendan hacer ejercicios mentales, como crucigramas, puzles, juegos de mesa, etc. Durante toda la vida debemos realizar prácticas para mantener la atención, así como para mejorar el lenguaje y las habilidades de cálculo.
5. Escucha música
El cerebro se puede estimular gracias a la música, especialmente la clásica. Las funciones neuronales se activan para disfrutar de nuestros artistas favoritos, a cualquier edad y en cualquier circunstancia. En consecuencia, escuchar música es beneficioso para mejorar la concentración y la memoria. Otra ventaja de oír música habitualmente es que ayuda a desarrollar las funciones auditivas, lo que nos permitirá conservar las relaciones sociales.
6. Disfruta del ocio
A través de las aficiones de cada uno también podemos conseguir mejorar nuestra memoria y evitar el deterioro cognitivo. La lectura de revistas, por ejemplo, nos ayudará a fijar la atención en temas amenos. Ver un poco la televisión también puede ser positivo, porque mantiene nuestros sentidos en posición de alerta, aunque siempre sin abusar. Si el proceso de deterioro cognitivo no ha avanzado mucho, es interesante participar en actividades culturales, como el cine o el teatro, la visita a los museos o la asistencia a charlas.
7. Revisa el pasado
Una actividad muy aconsejable para mantener una buena memoria es echar un vistazo a nuestro pasado. Las fotos y las cartas que guardamos en un cajón pueden servirnos para ejercitar nuestra actividad neuronal. El objetivo es activar la mente para recordar hechos sucedidos hace tal vez muchos años, y, de paso, mejorar nuestra agudeza visual.
8. Escribe el presente
En la mayoría de las ocasiones, los olvidos se refieren más a los hechos ocurridos recientemente. Por ello, para reafirmar nuestras sensaciones es muy interesante escribir un diario, por ejemplo, que nos sirve para refrescar el vocabulario, así como para fijar nuestros pensamientos. De esta forma se practica una de las fases de la memoria, como es la fijación.
9. Aprovecha las nuevas tecnologías
Muchas veces la soledad y el tiempo libre son problemas que pueden solventarse gracias a las nuevas tecnologías. El teléfono móvil, por ejemplo, nos permite estar en permanente contacto con familiares y amigos que se encuentran alejados de nosotros. Además, disponemos de muchos programas informáticos y videojuegos ideados para practicar nuestra memoria y evitar su deterioro.
10. Apunta las citas importantes
Para evitar que los despistes y los fallos puntuales de memoria puedan arruinarnos el día, un buen consejo es que nos apuntemos todas aquellas citas que consideremos importantes, o simplemente necesarias, como acudir a la consulta con el médico, comprar algo determinado en el supermercado o felicitar a alguien por su cumpleaños. En estos casos será muy útil utilizar una pequeña agenda o bien comprar papeles adhesivos para colocar en zonas visibles.
11. Recupera las tradiciones
Las nuevas tecnologías, en general, nos hacen la vida un poco más fácil; sin embargo, en este apartado te invitamos a que recuperes costumbres tradicionales, como memorizar algún que otro número de teléfono habitual o hacer las cuentas sencillas sin recurrir a la calculadora.
12. Intenta mantener el buen humor
El buen estado de ánimo es una de las claves de nuestra salud. Los médicos saben que la forma en que un paciente afronta la enfermedad es fundamental para conocer su desarrollo. De hecho, la soledad puede acarrear depresión, un síndrome que afecta a la memoria. Por tanto, es necesario mantener siempre el buen humor y debemos rodearnos de gente alegre y positiva.